¡Paga tus impuestos de una vez!

En "The Ultimate Legacy," el Dr. Don Jonovic menciona que los temas más críticos en un plan patrimonial son:

1. ¿Quién dirigirá qué?
2. ¿Quién poseerá qué?
3. ¿Cómo te asegurarás de tener la capacidad para pagar los impuestos para que realmente puedan ocurrir los dos primeros puntos?

La transferencia de autoridad puede ser aún más controversial que la transferencia de activos. Los activos son simplemente cosas y las cosas se pueden reemplazar. Con la autoridad viene el control, y cuando se otorga, implica respeto.

Muchas familias confunden la propiedad con la gestión. El simple hecho de que alguien sea dueño de un negocio no significa que deba dirigirlo. El orden de nacimiento y el género no deberían tener ninguna influencia en los roles en el negocio familiar. Algunas familias serían inteligentes al contratar una administración profesional no familiar para dirigir el negocio. Independientemente de quién gestione qué, los puestos de dirección deben basarse en la competencia.

La transferencia de activos es otro tema potencialmente divisivo. Intelectualmente sabemos que la distribución equitativa de activos no necesariamente es justa. Sin embargo, emocionalmente, puede resultar difícil justificar la distribución desigual. El problema se agrava cuando todos nuestros activos están vinculados al rancho. Esto hace que sea muy difícil distribuir los activos de manera equitativa sin perjudicar la operación.

Una solución puede ser dejar la tierra con un interés indiviso a nuestros hijos. Debería haber algún tipo de acuerdo de compra-venta para que si un hermano quiere tomar tu dinero y marcharse, pueda hacerlo sin deshacer el ranchos. Típicamente, el valor de compra de las participaciones se fijaría con un fuerte descuento sobre el valor de mercado de la propiedad. De esta manera, no obligas a los demás a vender para satisfacer al que quiere salir. El negocio operativo se le daría, vendería o arrendaría a un solo heredero. Ese heredero pagaría una renta al grupo de propietarios de tierras del cual es parte.

Nadie quiere pagar más impuestos de los necesarios, pero no dejes que la evasión fiscal sea el principal impulsor de tu plan. Busca formas de minimizar tu responsabilidad fiscal después de haber decidido cómo aumentar y proteger el valor del propietario, proporcionar para tus necesidades en la jubilación, hacer la transición de la gestión a la próxima generación y distribuir los activos de tu patrimonio.

Trabajé con una familia que aprovechó una oportunidad para evitar una factura de impuestos potencialmente grande sin hacer estas otras cosas primero. Esto preparó el escenario para una pesadilla emocional y legal para todos. Pueden haber evitado al recaudador de impuestos, pero no evitaron a los abogados y pueden perder el negocio. Colocar la evasión fiscal como tu máxima prioridad puede ser una estrategia muy costosa.